Uno de los momentos más dolorosos en la vida de cualquier deportista es el momento de la retirada. Tomar esa decisión cuando aún se es joven (29 años) y estando en plena forma física aún lo es más.
Este es el caso de Rubén Pérez Marcos, nuestro rubio jugador que después de disputar cuarenta partidos vistiendo la elástica de nuestro club ha decidido abandonar la practica del baloncesto “semi profesional” por cuestiones laborales.
Por esos 40 partidos, por los 649 minutos sudando nuestra camiseta, por los 121 puntos que nos levantaron del asiento, por esos 95 rebotes que nos dieron la posesión del balón, por los 39 balones robados que posibilitaron correr al contraataque, por esas 44 asistencias que hicieron felices a sus compañeros, por esas horas de entrenamientos a altas horas de la noche… por todo eso y por más deseamos a nuestro “Chiqui” la mayor de las suertes, agradeciéndole todo lo que ha dado de manera desinteresada al baloncesto de esta ciudad y sobre todo a esta que es y será siempre su casa.
Desde aqui le deseamos lo mejor y esperemos que vuelva
Fuente: Web Fundación Granada
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